¿Cómo encontrar la inspiración?
Con tantos elementos a tener en cuenta a la hora de construir tu historia (planteamiento claro, conflicto definido, final satisfactorio) puede que experimentes cierto bloqueo. No te asustes, los relatos audiovisuales tienen básicamente cuatro fuentes de inspiración:
- Otras creaciones.
- Hechos vividos.
- La experiencia cotidiana.
- La imaginación.
- Otras creaciones.
- Hechos vividos.
- La experiencia cotidiana.
- La imaginación.
Aquí tienes un ejemplo de cómo hasta grandes creadores como Tarantino encuentran la inspiración copiando:
Everything Is A Remix: KILL BILL from robgwilson.com on Vimeo.
Everything Is A Remix: Kill Bill. Editado por Robert Grigsby Wilson. 2011. Duración: 5’30 minutos.
De modo que, para encontrar buenas historias:
- Ve mucho cine y…sí, también televisión. Puedes aprender mucho viendo distintos formatos y géneros.
- Lee, lee y vuelve a leer. No sólo novelas, sino también noticias, páginas web, blogs.
- Observa y pregunta. Abre tus sentidos: la calle está llena de historias y personajes interesantes.
- Elige temas que conozcas o te apasionen y documéntate sobre ellos.
- Apunta tus momentos “bombilla”. Lleva siempre contigo una libreta o tu móvil, donde apuntar (o fotografiar) aquello que te inspire.
- Copia y reinventa. No te obsesiones con encontrar una idea nueva. Lo importante será tu mirada.
- Modifica una historia clásica. Son las que mejor estructura de guión tienen así que puedes traerlas al presente y readaptarlas a tu cotidianidad. Lo mismo con las fábulas y cuentos universales.
- Empieza inventándote un personaje. Describe cómo es, dónde vive, a qué se dedica, con quién se relaciona…A medida que vayas indagando sobre su vida, tu personaje acabará descubriéndote su historia.
Además existen multitud de técnicas de creatividad para generar ideas, que puedes usar tanto a nivel individual como en grupo. En la web de neuronilla.com puedes encontrar mucha información al respecto.
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